Tolerancia i especificitat

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J.Corominas:  retalls de 
 " Tolerancia y oscurantismo en la sociedad mundial":

La Tolerància

La tolerancia, como los mejores ideales, fácilmente se convierte en una especie de ideología. A veces puede designar una especie de desinterés e indiferencia (...) otras veces la defensa de la tolerancia esconde la defensa del fanatismo (...) también apreciamos fácilmente como son los grupos de poder los que más hablan de tolerancia, frente a las víctimas, que al no tener más que el grito, son encima consideradas " intolerantes "(...)
Frente a estas diversas ideologías de la tolerancia, se podría hablar de una tolerancia crítica que mediante la fuerza de la razón sentiente, busca el diálogo y la crítica correctora, pero también busca determinar dónde termina el respeto a la diferencia y donde comienza la indiferencia y la irresponsabilidad por la situación del otro.

La tolerància en l'àmbit de les religions i  especificitat del cristianisme :

Hoy hay una tendencia espontánea hacia la equiparación simple y directa de todas las religiones. Este universalismo religioso indiferenciado, en el que todas las religiones son caminos que conducen a Dios, goza de grandes simpatías entre nosotros, pués en la sensibilidad actual estamos ya totalmente escarmentados de dogmatismos y etnocentrismos. Por otra parte aparece el influjo de las religiones de oriente, con su no valoración de la historia y si insistencia en la idéntica presencia vertical del Absoluto en cualquier momento del tiempo.

La posición fundamentalista de este esquema  subraya muy bien como todas las religiones participan a su modo de la verdad, pero la posición de este universalismo histórico indiferenciado es también muy insatisfactorio al no darnos criterios de discriminación entre las diferentes experiencias religativas al poder de lo real. Haciendo un esfuerzo, uno podría decir que en todas las religiones hay que distinguir entre sus verdades fundamentales y las prácticas de los creyentes, pero por más esfuerzos comprensivos que hagamos, encontramos contradicciones insuperables. ¿ por qué tendríamos que negarlas? ¿ por qué negar las diferencias? Así por ejemplo, entre exigir sacrificios humanos o pedir el amor incluso a los enemigos, así como entre ver a Dios como creador libre del mundo o verlo en sus diversas formas sometido al hado, no cabe hablar de meras variantes...

(...) Otra alternativa sería el universalismo religioso ético, donde todas las religiones convergen en la regla de oro de la compasión y la sensibilidad por el sufrimiento (...) También en el budismo hay una gran compasión frente al sufrimiento, pero en el budismo uno aprende a hacerse invulnerable e inmune al sufrimiento, a alzarse por encima del sufrimiento, mientras que en el cristianismo uno aprende a hacerse débil y vulnerable (...) El problema es que en esta posición, lo más específico del cristianismo, la fe en el Dios crucificado, parece que se convierta en un aditamiento de algún modo accidental...

La gratuitat és la resposta:

La gratuidad, si es verdadera gratuidad, está precisamente reñida con el fanatismo y la intolerancia, pero también con las ideologías de la tolerancia. Se trata de una especie de confesión humilde, alegre, solidaria y sobretodo tierna, de quien cree haber descubierto algo que Dios quiere revelar y entregar a todos (...) 

La lógica de la gratuidad supone por un lado, una clara y confiada afirmación de la propia identidad, sin desdibujamientos, y por otro la humildad de quien no remite a si mismo (...) consciente de que esa gratuidad podría estar expresándose a veces mejor en otras plasmaciones religativas y biografías humanas , que en la suya propia (...)

Quien a través de Jesús ha descubierto que Dios es amor ( 1Jn 4,8-16), presenta a un Dios que en su amor (...) no responde a la pregunta por el justo o el inocente que sufre, puesto  que Dios solo responde sufriendo, solidarizándose hasta la muerte con el dolor humano, acabando con un grito (...)

Però la mort i el sofriment no tenen l'última paraula ::  1 Co 15,4-8 :

(...) ressuscità el tercer dia,com deien ja les Escriptures, i s'aparegué a Cefes i després als Dotze. Després es va aparèixer a més de cinc-cents germans a la vegada, la majoria dels quals encara viuen, però alguns ja són morts. Després es va aparèixer a Jaume i, més tard, a tots els apòstols. Finalment, al darrer de tots, se'm va aparèixer també a mi.